Un discípulo a su Maestro:
¿Hay algo que yo pueda hacer para llegar a la iluminación?
– Tan poco, como lo que puedes hacer para que amanezca por las mañanas.
– Entonces, ¿para que valen los ejercicios espirituales que tú mismo recomiendas?
– Para estar seguro de que no estás dormido cuando el sol comience a salir.
Cuento Sufí
He llegado hasta aquí de casualidad. Me gusta lo que veo y leo. Así que me quedo. Gracias.
Me ha gustado el cuento, si, corto y directo, con tu permiso me lo copio
Un saludo,
Si todos pudieramos sentir y palpar el aire de cierto nos asombraria, me gusto mucho esta pagina y me quedo con ella.
Gracias por dar luz