pasamos media vida esperando a la persona que amamos, y la otra media, dejando a las personas que nos aman.

En ese ir y venir a uno la da tiempo a cometer muchos errores de cálculo, y de todas las mujeres del mundo, elige aquella que no lo quiere abrazar; de todas las manos del mundo, elige aquellas que no lo quieren tocar; de todos los vuelos de vestidos que posiblemente marquen el ombligo debajo de la figura de la mujer uno decide querer aquel, que no puede abrazar.

Y entonces… pasa lo que pasa…

 

Victor Hugo